El domingo pasado un surfista australiano Michael Bedford consiguió escapar del ataque de un tiburón blanco tras repeler el escualo a puñetazos en Albany, Al sur de Petch, Australia. Cuando salio despedido de la tabla de surf tras la primera embestida, el surfista evitó un segundo ataque tras golpear al tiburón con los puños y se escapo en una ola para llegar a la orilla. Sufrió heridas profundas en la pierna pero sus amigos le hicieron un torniquete por una mordedura. Ingresó en el hospital, y tuvo que ser intervenido quirúrgicamente, su estado es estable.